Daniel Sada - El lenguaje del juego

 El lenguaje del juego

Novela ágil: rapidez lirica que despunta con humor inteligente, lenguaje coloquial en su versión extrema,  algo que de otra forma solo puede mirarse con horror. Una historia tortuosa: ensangrentada. Caben, entonces, los susodichos vaivenes de cada cual, personajes de un país alborotado por el dinero fácil que fluye en minucias.
Intriga norteña narrada a ritmo vertiginoso y que se hace harto magistral.
Muertes espantosas que uy: cuerpos mutilados que a nadie le importan, incognitos que se perdieron,  gentuza desechable que vivía para servir a sombrerudos forrados de billetes, o pobres hombres que mueren nomas porque sí. Inservibles, todos, pero con sus intrigas que son contadas con un nivel superlativo por este maestro del lenguaje.
       San Gregorio, un pueblo de Mágico, tranquilo, antes, cuando la vida era humilde pero honrosa, es el escenario, el circulo reflexivo que nuestro autor, Daniel Sada, usa para evidenciar el cambiazo ingrato de las vidas de todos aquellos que, por razones oscuras, o meramente azarosas, se ven inmersos en la vorágine del narcotráfico.
        De los muchos compatriotas que regresan de Gringolandia a los terruños de Mágico está Valente, un hombre,  ducho en eso de hacer pizzas, que, cansado de ir y venir de la frontera, decide poner un pequeño negocio, su pizzería, para, ahora sí, lograr una estabilidad. Empieza, pues, a conocer que para los jodidos, ni aquí ni allá, es la vida fácil.
    Al principio la pizzería va bien. Ahí trabaja su hija Martina, y su hijo Candelario, quienes, en un abrir y cerrar de ojos, se irán, ella enamorada de un sicario, él por invitación de un amigo que es hijo del capo que controla ese pueblito, nomás para pasar penurias.
      Lo que más me sorprende del estilo con el que escribía Daniel Sada es que su lenguaje entretiene y al mismo tiempo clarifica la diversidad orgánica de sus personajes, todos ellos, bastantes emblemáticos de un paisaje muy de un país, al que él, en este libro, prefiere llamar Mágico antes que ponerle su nombre, y este sencillo recurso, ejemplifica su singular manera de mostrar y explicar lo que sucede en tierras secas, habitadas por gente pobre, que debe esforzarse para sobrevivir a duras penas con lo mínimo.
     Historia triste, y a la vez muy graciosa, ¿dije bien? Sí, ya que Sada escribe de tal manera que nunca deja de sorprender con sus recursos liricos poéticos del norte, y tan sencillo, el horror. Sada lo describe así, tan chulo: «tímida exhibición de cuerpos colgados de alguna rama de nogal o mezquite o sauce, amén de uno que otro decapitado adornando un suelo terregoso o pastoso». Uy, un genio, nadie lo niegue.

El lenguaje del juego

Valoración/ Puntaje
Estilo/recursos literarios
10
Argumento/ Inicio
8
Desarrollo
10
Desenlace
8
Puntuación total
9.0
Clasificación
Inolvidable









Pésimo
Apenas publicable
Recomendable
Inolvidable
Indispensable
5 a 6
6.1 a7
7.1 a 8
8.1 a 9
9.1 a 10

 

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