Jürgen Habermas en su vasta obra sociológica instaura
un campo de estudio donde confluyen varias ramas del conocimiento, en principio
su postura viene a refrescar lo hecho por sus antecesores directos, me refiero
a los fundadores de lo que se conoce como la Escuela de Frankfurt, esto es
importante, ya que Adorno junto con Horkheimer no se mostraron muy satisfecho
con los primeros trabajos de su joven discípulo. No obstante, Habermas, junto
con la segunda generación de la Escuela de Frankfurt, continúan la Teoría
Critica pero con la gran diferencia de realizar un análisis multiparadigmático
de los fenómenos sociales.
La Teoría Critica en su primera generación alude a una
investigación del mundo de la vida desde un marxismo cultural, donde existe
interés por conocer los aspectos que refieren a la infraestructura social
(objeto la economía capitalista y la historia del movimiento obrero)así como a
la superestructura, donde se hace síntesis de ideas marxistas,
psicoanalíticas y hegelianas, que proceden de un individualismo propio de
la lebensphilosophie (filosofía de la vida)
Para ello es importante conocer que Habermas alude a una
razón comunicativa para ayudarse a continuar con el camino de sus
investigaciones.La razón comunicativa se da a través de actos
lingüísticamente mediados, donde el mundo de vida es el medio en el cual se
lleva a acabo la acción comunicativa desde un determinado nivel lingüístico o
situación de acción.
En este libro se habla acerca de que un concepto de sistema
será apto para las ciencias sociales en conexión con una teoría de la comunicación,
que parte de la existencia de sujetos capaces de habla y de acción. De eso se
puede extraer que en la visión habermasiana los sistemas de sociedad
"pueden mantenerse frente a la naturaleza exterior mediante acciones
instrumentales (siguiendo reglas técnicas) y, frente a la naturaleza interior,
mediante acciones comunicativas (siguiendo normas de validez) ". p.33
Sobre dicha idea eje, brotan otras tantas, de las más
interesantes me parece aquella donde Habermas a grandes rasgos dice que las sociedades
pueden concebirse también como sistemas, aunque en el modo de su movimiento no
siguen solo la lógica de la ampliación de la autonomía sistemática (poder); más
bien, la evolución social procede dentro de los límites de una lógica del
mundo-de-vida, cuyas estructuras están determinadas por una intersubjetividad
producida lingüísticamente, y se basan en pretensiones de validez susceptibles
de crítica.
En el capitalismo tardío los poderes fácticos pretenden
mantener la anonimización política del dominio de clase y ésta es
reforzada por una anonimización social que se desarrolla sobre la base de la
crisis sistémica reelaborada y reprimida, con lo que se reafirman ciertos
antagonismos.
Entendiendo que en un contexto mundializado es que las
funciones instrumentales de la administración se protegen con dispositivos
selectores y se producen en medio de un desgaste de la explotación de
contenidos culturales para fines administrativos o estratégicos respecto del
mercado, ejemplo de manejo administrativo directo de la tradición cultural es
la planificación de la formación, en particular del curricular en los planes
educativos de las naciones.
Otro apunte interesante que me ha quedado de lo expuesto por
Habermas, radica en que este autor habla acerca de la democracia actual,
la cuestiona en el sentido de que su función hace imposible
satisfacer todos los intereses legítimos, en cambio ahora se da
únicamente una distribución de recompensas conformes al sistema.
En este blog es importante además de reseñar, dar la opinión
y referir aquellas características que hagan la lectura provechosa o
inadecuada según los intereses de cada uno. Les puedo decir, en este texto,
encontrarán una rica discusión acerca de las desviaciones de responsabilidad
social propias de un Estado anémico, ventajista, que bajo un modelo económico
envejecido legitima sus acciones a base de la sumisión espiritual y cognitiva
de la gente. Es de una lectura sencilla, y no se necesita tener amplios
conocimientos filosóficos, sociológicos o económicos. Aunque lo escribió hace
cerca de cuarenta años, sigue vigente, en especial para los lectores de países
latinoamericanos, donde las ideas neoliberales afectan los quehaceres
ciudadanos.
Habermas no es realmente un pensador radical, desde mi punto
de vista es centrado, aunque muchas veces parece inclinarse a la
izquierda política también sus ideas tienen mucho de conservadoras, lo digo
porque aboga por continuar un proyecto, conservarlo, la modernidad continua, es
un proceso inacabado, pero desde donde se pueden mejorar muchas de las penurias
actuales, es decir, no busca la ruptura sino la conciliación de los actores, de
la sociedad y de los políticos.
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Contenido académico: 7 Estilo explicativo: 8
ME SIRVIO XQ ESTOY LEYENDO A W. STREECK ,Q SE BASA EN ESTE LIBRO DE J. HABERMAS.
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