Lamento decir que si leen en la contraportada del libro y creen que es " profunda, emblemática llena de imaginación y creada con una narrativa sorprendente" no es así.
No es profunda, en ningún sentido, más bien es sencilla y simple, tampoco puedo aceptar que sea emblemática ( se excedieron poniendo eso) dice la editorial la novela bulle imaginación pero lamento decir de lo que más carece es precisamente de idea original, le falta a la novela imaginación, todo es bastante predecible.
Los personajes empezando por Pablo que es un matemático que vive en un matrimonio aburrido, me parece simple, algunas veces muestra algo de chispa , pero termina por ser acartonado.
La esposa Nadia, al principio es mero adorno sin embargo conforme avanza la historia toma un papel más relevante, la situación de su jefe el señor Guzmán me pareció lo más imaginativo de la historia.
Y por ultimo Lola o Dolores como en realidad se llama, es una chica que busca ser pintora y que ha soportado el rechazo de sus obras y a su madre que es una señora bastante quejumbrosa.
Pablo y Lola se conoce de una forma algo peculiar, en el Metro de la ciudad de México, en la estación Polanco, asi es como inicia la novela.
Tiene puntos positivos los primeros dos capítulos me gustaron, era prometedor el inicio,me agrado la manera en que los escribió pero conforme avance en la lectura note varias palabras que el autor repite una y otra vez, puede resultar chocante siendo lector ver que el escritor no se esfuerce en buscar alternativas para explicar algo, existen miles de palabras las cuales bien podría usar en lugar de las que repite.Al final retoma fuerza la historia, en especial cuando el autor describe la situación, los primeros capítulos y los últimos son muy buenos. Si de verdad es el mejor libro que ha escrito Óscar de la Borbolla, es probable sea un autor poco imaginativo. Abundan los clichés en la historia, si hay destellos en el estilo literario, lo que permite salvar la novela.
No la recomiendo, pero tampoco puedo decir rotundamente me arrepiento de comprar el libro, la lectura de El futuro no será de nadie por algunos momentos entusiasma pero la mayor parte de la historia decepciona.
Contenido 7
Fragmento extraído del libro
Un tono gris, incluso más gris que cuando había salido de la casa paterna, se difundió en su estudio, un gris que cuando amenazaba con volverse negro absoluto fue desgarrado por un destello, por un timbrazo de teléfono, por un qué tal, soy Pablo, ¿podríamos vernos hoy? Y claro, cómo no verlo ese mismo día, si llevaba toda la vida esperando a alguien que la devolviera a sí misma, que apreciara ese lado de ella misma que ningún Esteban había podido ver. Porque ella era, principalmente, esa voluntad de ir configuran¬do con manchones y dudas otro mundo, su propio mundo. Y lo había ido descubriendo con cada arañazo de sus pinceladas, aunque nadie lo hubiese notado; nadie más que Pablo, a quien vería a las 7:30 de la tarde.
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